La selección paralizó los festejos del bicentenario
El seleccionado argentino goleó el pasado lunes a Canadá por 5 a 0 en el último amistoso internacional antes de viajar a Sudáfrica para disputar la Copa del Mundo, en un partido que también formó parte de los festejos por el bicentenario argentino.
Como se puede apreciar en las imágenes, el partido cambió el paisaje de toda la avenida 9 de julio. Poco antes de las 15:40 por las pantallas gigantes se podían apreciar las diferentes actividades programadas para conmemorar los 200 años de la revolución de mayo, pero cuando canal 7 dio inicio a la transmisión que tenía preparada, el clima que se vivía cambió, los cantos se convirtieron en gritos de apoyo, la alegría se transformó en ansiedad y tensión.
Solo bastaba con una pequeña interrupción de la señal para que los cientos de personas alzaran sus manos en señal de reclamo, no se escuchaba ni una sola voz cuando en las pocas ocasiones que el equipo canadiense toco el balón más allá de la mitad del terreno, pero todo esto cambio a partir del minuto 15, cuando Maxi Rodríguez ejecuto magistralmente un tiro libre que abrió las puertas a la goleada y de paso devolvió la tranquilidad a los hinchas argentinos y a Diego que ya empezaba a extrañarse por el resultado.
Después del primer gol vinieron una cascada de aplausos y elogios seguidos de más goles, en total 5, (Tevez, Agüero, Di maría y Rodríguez nuevamente.). Con el partido ya definido, el público presente en micro-centro, empezó a corear el nombre de Martin Palermo, el cual ingreso a los pocos minutos, pero no pudo convertir el gol que deseaban los aficionados.
Cuando el árbitro peruano dio final al encuentro las cámaras de canal 7 dejaron de enfocar por unos minutos los festejos en el estadio y se dirigieron a la avenida 9 julio, en ese momento la gente estalló de alegría y se retomo el clima que se vivía anteriormente. Poco después las pantallas dejaron el futbol a un lado y volvieron a las actividades, pero en las caras de los asistentes se notaba una felicidad mayor, nadie comentaba ya las danzas tradicionales ni la grandeza de los stands, todos ahora hablaban de la grandeza de Maradona y de el baile que le dio el cambiando nacional a su par de Canadá.
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