13 octubre 2013

Mitos Olímpicos


Los Juegos Olímpicos modernos, que son considerados como el mayor evento deportivo internacional, se inspiraron en los del siglo VIII A.C organizados por los antiguos griegos en la ciudad de Olimpia. Actualmente cuentan con la participación de más de 200 naciones en una tradición que se remonta a 1896, año en el cual se realizaron las primas justas organizadas por el COI.
Desde entonces, esta competencia, que se realiza cada 4 años de manera casi ininterrumpida, ha ido adquiriendo muchos elementos que la caracterizan, como: la llama olímpica, los anillos e inclusive el amateurismo. Muchos piensan que estos también tuvieron origen en su par helénico, cuando este, en realidad era bastante distinto. Para aclarar estas dudas, el profesor Gustavo Abreu, estudioso en los antiguos juegos de Grecia, nos dio una charla clarificadora sobre el tema, que intentaré resumir a continuación.
Para comenzar, está la ceremonia de apertura. Este rito tan esperado cada año en el inicio de la competencia moderna, no se realizaba en las justas originales. Lo que si había al inicio, era sacrificios de animales debido al origen funerario de las pruebas antiguas. Éstas se iniciaron para conmemorar la muerte de personas importantes, por lo que si había derramamiento de sangre en honor a los muertos, era mucho mejor.
Los aros que representan a los cinco continentes que se han unido por los juegos, tampoco tienen un origen helénico, ya que para ese entonces los juegos eran bastante estrictos en ese aspecto, solo podían participar ciudadanos griegos. Previo a la competencia, unos jueces llamados Helanosides comprobaban que los interesados en participar cumplieran los siguientes requisitos para autorizarlos a competir: no tener condenas penales, hablar griego y tener linaje helénico.
Se dice también que La llama Olímpica conmemora el robo del fuego de los dioses por parte de Prometeo y su posterior entrega a la humanidad, y que por esta razón se mantenía una antorcha mientras se competía en la antigüedad. Sin embargo, según Abreu, nunca hubo fuego en los juegos helenos, por ende, la antorcha olímpica más que un elemento milenario es un invento moderno. El profesor explicó que la tradición remonta a la edición de Berlín 1936, donde el jefe de propaganda nazi, Paul Joseph Goebbels, ante un corto presupuesto para la realización de los Juegos, apostó por crear un recorrido de relevos, en el cual la llama sería trasportada desde Olimpia (sede de los juegos griegos) hasta la sede actual de las justas, hecho que dio una gran difusión.
Otro de los puntos más polémicos que propuso el olimpismo moderno de Pierre Frèdy, Barón de Coubertin fue el amateurismo. Se habla muy frecuentemente de un origen antiguo, en el cual solo se competía por amor al deporte, por ser el mejor y no por dinero. No obstante, se comprobó que en la época griega había juegos de esta índole cada año, y había también, gente que vivía exclusivamente de competir en ellos. Estudios actuales afirman que un deportista podía ganar hasta 300.000 euros anuales por su alto desempeño en las disciplinas. Y estas no eran las únicas prácticas en las que estaba involucrado el dinero, ya que había una pena establecida en las reglas para el soborno, lo que prueba la existencia de la trampa. Para esos tiempos, se registra el primer traspaso de jugadores, específicamente el caso de Astylos de Crotona, el cual en unos juegos compitió para su ciudad de origen y en los siguientes después de un pago de otro rey griego, el atleta decidió defender los colores de Siracusa.
Entre otros mitos están: que las guerras se detenían durante la competencia, esto no es del todo cierto, porque solo se detenían las guerras entre los pueblos griegos, las internacionales se mantenían; la prueba de la maratón no es de origen helénico, en esa época la prueba más larga era el dolícos y eran 24 vueltas al estadio que jamás alcanzó la cifra de 42 kilómetros; las frases que se atribuyen a la práctica del deporte olímpico como citus, altius, fortius o mens sana in corpone sano son de origen latino y no griego.

                                                                                                                        
                                                                                                      

                                                                    Francisco Moreno...
                                                                    ...@franjavimoreno

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